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martes, 25 de febrero de 2014

CABALLO VOLADOR



CABALLO VOLADOR
(Publicado en el diario "Yaracuy al Día"
24 de febrero de 2014) 

 

Por:  Helen Patricia Puertas

He descubierto un caballo volador. No es producto de mi fantasía, atribulada entre la convulsionada realidad. Es que en verdad, hace pocos días salió volando uno, viejo, bello y fuerte. Enamorado como el solo sabe hacerlo: de la vida, de la belleza, enamorado del amor, de la tonada, del ladrido de los perros en la noche; enamorado de la inmensidad del mar, pero sobre todo enamorado de la llanura.
La misma llanura que lo inspiró a enamorarse sin mirar el calendario y menos prestar atención a la mirada despectiva hacia el hombre llanero. Fue entonces que no solo demostró ser un caballo fuerte, sino que la imaginación rica en aventuras del día a día, movieron su mano para escribir poemas que luego fueron canciones. Sus canciones que encierran un mensaje de paz, amor, ternura y un alto sentido de patriotismo.

ASÍ DE ESTA MANERA
CUANDO EL AMOR LLEGA ASÍ DE ESTA MANERA, uno no tiene la culpa, pero uno si tiene culpa  al destruir Venezuela. La idea es hacer paz, amar sin tomar cuenta ni horario, ni fecha en el calendario, porque para hacer el bien el tiempo es eterno y para hacer el mal el tiempo si está contao. Y pregunto al ARBOLITO SABANERO ¿Qué está pasando arbolito sabanero?
Y al mirar atrás solo veo decir “QUE FUISTE TÚ, QUE SI YO, QUE NO, QUE SI TÚ” quien causó el destrozo, porque aquellos que organizan el desastre se escudan el rostro.
Pero yo se que Venezuela es noble por naturaleza, y el buen venezolano, la quiere, respeta y abraza, y se siente orgulloso de tenerla como patria.El BUEN VENEZOLANO, es todo aquel que cuida y ama nuestro suelo y lo levanta en un puñado bajo el cielo y grita ¡viva, que la Patria es lo primero!.
¿Y cómo no amar a Venezuela? Si llevamos su luz y su aroma en la piel y el cuatro en el corazón para cantar a los cuatro vientos que en Venezuela la mujer es corazón, fuego y espuela y el hombre para conquistar su corazón, no regala flores sino completica la LUNA DE MARGARITA y un mirador hacia el Mar de Las Antillas mientras recibe caricias sencillas, parecidas a las de aquel BECERRITO, que las recibía de su vaca mariposa, recordando a la dulce Virgen María con su niño en el pesebre, pero con sabor a llano y venezolanidad, pura y transparente como el corazón patriota del Venezolano que ama su tierra. Al amarla no la destruye; la construye. Al amarla, la cuida, la preserva y enaltece su flora, su fauna y a su gente también. Por todo esto hay que pedirle a la Virgen del Valle, a la Virgen bonita que proteja esta tierra, a la gente, ilumine el corazón de todos, para que se fortalezca el que mira con alegría la vida y aquel contaminado por amargos pensamientos sean silenciados con la fuerza imbatible del amor, porque toda pena tiene cura. Como tiene cura la anarquía si el gobierno hace justicia social y hace valer sus decretos, ejerciendo la representación de Venezuela, tierra del Libertador.

EL PARAÍSO ES UN LLANO
Parece que hay personas tan sabias que saben cuando retirarse. Simón Díaz se transforma en energía para volar al encuentro con Dios, en ese cielo que debe ser un paraíso llanero, hermoso, con vacas, becerros, gavilanes, gallinas y gallos a quienes deleitará con sus tonadas mañaneras, y el sonido del cuatro de fondo. Se duerme cuando Venezuela se ve sacudida por una estampida de violencia como para decir: “Miren acá, recuerden que la vida es bella, y es para servir, para  construir y hacernos felices los unos a los otros… Es que después de esta vida no hay otra oportunidad”. Se va en medio de una Caracas atacada por unos cuantos, que como piedra en el zapato, causan molestia e incomodidad.
Su hija escribió en twitter: “En nombre de los que están queriendo llegar al Cementerio del Este a despedir al Tío Simón, pido abran el paso”. Seguramente su familia ha querido compartir la nostalgia con el pueblo, que tanto amó a ese Tío.
Para la posteridad quedan sus poemas de amor por Venezuela, hechos canción; su tierna sonrisa, su amor por esta tierra, sus ocurrencias. La representación de la noble patria, toda ella hecha hombre. Un hombre que interpretaba los sentimientos y le daba voz a los animales, haciéndolos protagonista de su ritmo; dándole vida a los paisajes, como si ellos hablaran con su belleza infinita, haciéndonos sentir orgullosos de esta tierra. ¡Si, caracha!... no me da pena afirmar, que, definitivamente los caballos voladores existen. Y para prueba un botón: existe uno que ya voló al encuentro con Dios.



jueves, 2 de enero de 2014

PARA LA REFLEXIÓN




VIDA NUEVA
(Publicado en el diario "Yaracuy al Día" el 31 de diciembre de 2013)


Helen Patricia Puertas
El fin de año representa la apertura a las oportunidades. Como el renacer del ave fénix, resurgiendo más hermosa de sus propias cenizas. Culmina un año que estuvo signado por hechos que marcaron a todo un pueblo, y más allá de la geografía nacional, traspasando fronteras e ideologías. Ese cambio también representa la transformación de la sociedad, de las estructuras e instituciones, pero sobre todo de la forma de concebir la conducción de los gobiernos, porque es esta la base sobre la cual se sostiene el orden de las naciones.
Por ello, la gran responsabilidad de los gobernantes, pero –no es atrevido afirmarlo- sobre todo de los identificados con el proceso revolucionario. Porque no puede quedarse un postulado tan noble como el humanista y socialista, en solo el verbo. Es la acción lo que demuestra la fuerza del verbo. Entonces el verbo se hizo tierra, se hizo hombre y se hizo mujer. Con solo el aliento divino. Es lo que supone un pueblo esperanzado que por cierto, todavía necesita seguir madurando. La responsabilidad de seguir avanzando en positivo–valga la redundancia- no es solo del Presidente Maduro. Es de un equipo que en colectivo gobierna junto al pueblo empoderado, al lado de los funcionarios y de los ciudadanos que se desempeñan desde cualquier ámbito; sea el público o privado, sea ama de casa, estudiante, educador, vendedor informal, trabajador doméstico, del campo, comerciante, del consumidor. En fin, es la responsabilidad compartida representada en la apertura al diálogo convocada por el primer mandatario, a sabiendas de que es necesario abrir las puertas al diálogo, dejar a un lado las diferencias, respetándolas pero recordando que lo importante es el pueblo, un pueblo que decidió democráticamente su destino en un ambiente absolutamente democrático.
Y continuará la revisión profunda de cada conciencia, los planes, luego los proyectos, luego las realidades, de la mano la voluntad Divina que dirige cada hoja que se mueve pero que privilegia el libre albedrío. La libertad de acción que heredamos con sus consecuencias por la impertinencia de Adán y Eva, y que todos los días nos dispone ante las decisiones. Si el trabajador público se corrompe o no; si los usuarios buscan subterfugios no convencionales; si el empleado privado burla la confianza del jefe; si el ama de casa sostiene el orden o no lo hace; si el estudiante estudia o se copia; si el educador educa o corrompe; si el comerciante especula o acapara; si el consumidor revende y hace su propio negocio; si la trabajadora doméstica le sustrae a su jefa algo de detergente, artículos de consumo o ropa; si el trabajador del campo trabaja o revende la tierra asignada. Si el gobernante gobierna con eficiencia socialista.
El Presidente ha convocado al pueblo a sostenerse en la inspiración para ser mejores. Y esto solo se logra al comprender la trascendencia de cada acción acometida. Es oportuno el momento del renacer para lo constructivo y repensar los mensajes, sustituir las ideas por otras mejores y que las generaciones que hoy son niños y adolescentes, y que por alguna razón se hayan visto influidos por mensajes de odio, rencor, resentimiento, segregación, puedan encontrarse en ambientes de amor y reencuentro, donde impere además las solidaridad, que no es más que la identificación con el otro, y solo en ese momento se entenderá lo que significa ser el prójimo de otros.
Se puede aprovechar esta época para rescatar la conversación, enseñar con el ejemplo, valorar lo espiritual, apreciar la naturaleza, y todo esto no es más que amar a Dios, y pedirle que proteja a este pueblo de sus propios impulsos y pedirle que nos dé más optimismo,  fortaleza, creatividad, amor y nos haga mejores.
La inmediatez de obtener un lucro rápido y sin esfuerzo, desvía la atención de la creatividad que todos poseemos. Y esta tendencia, producto de un exacerbado espíritu consumista, ha de ser erradicada para valorar lo que se debe valorar en su justa dimensión humana y espiritual.
Lo demás es trabajo, pero trabajo con transparencia, con honor, con dignidad. Son los principios que enaltecen y hacen magnánimo un espíritu, no para alimentar la vanidad sino para ser constructores de un presente mejor. Responsables serán los gobernantes al rendir cuentas al pueblo, responsable será el pueblo en el ejercicio del poder comunal. Y al condenar a un gobernante que no haya una paja en su propio ojo. Mientras más alta la investidura, más cercano a la realidad ha de estar la persona para no perder nunca el norte, y dar el lugar honorable que le corresponde a sus responsabilidades, que están plasmadas en la ley, y sobre el territorio de Bolívar se encuentran expresamente señaladas en un poema que hoy es ley, y que es el Plan de la Patria, instrumento reconocido hasta por los adversarios, quienes definitivamente han entendido que la vía es el Socialismo.
Lo importante es que esto no lo olviden ni los unos ni los otros. Y tampoco el pueblo.